Seguimos en ese trabajo continuo de conversión de los pensamientos. Jesús nos revela que Dios no es ese ser caprichoso que a veces da cosas buenas y a veces cosas malas; sino que es un Padre que siempre da cosas buenas. De vez en cuando emergen en nuestra mente ideas sobre Dios que intentan alejarnos de su corazón paternal. Son esas ideas que queremos podar, las que queremos desterrar de nosotros. Para saber cómo andamos sobre esto basta con ponerte en oración y ver qué se mueve en ti, cómo te sientes. Si como un niño que habla con su papá o como uno que intenta que el Señor feudal le haga una merced. Poda Señor, poda nuestros pensamientos que nos alejan de tu misericordia. Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.