María y José hicieron lo que estaba previsto en la ley y fueron a presentar a su primogénito al Templo. Allí los aguardaba un anciano que esperaba al Mesías y que no se iba a morir sin verlo. Simeón es prototipo de buscador, de la persona que ha puesto un nombre a du deseo de felicidad y de forma misteriosa se deja llevar por ese impulso interior que no sabe aún que se llama Espíritu Santo. Así Simeón estuvo en el momento justo y en lugar justo para que se produjese su encuentro con Jesús. Estos días estamos invitando a Alpha. Invitamos a todos, a muchos, pero sólo los que como Simeón buscan algo más dirán que sí a la invitación. Pedimos por ellos para que sepan estar en el lugar justo y en el momento justo. Feliz dia de la candelaria y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
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