Ayer vivimos en la Parroquia un momento muy especial. Llevamos varios cursos reuniéndonos en pequeños grupos cada quince días. Necesitamos reunirnos para vivir un auténtico seguimiento de Jesús, para ser discípulos suyos. Jesús llamaba a seguirlo en un grupo de discípulos. Hemos explorado diferentes estilos y fórmulas de pequeños grupos y hemos dado con el SISTEMA DE CÉLULAS PARROQUIALES DE EVANGELIZACIÓN. Hemos elegido este modelo porque es muy misionero. Los pequeños grupos corren el peligro de volverse grupos cerrados que se estancan. Las células son grupos que crecen por la incorporación de nuevos miembros hasta que llega el momento de dividirse en dos nuevas células. Así los grupos se van multiplicando ya que su miembros están convencidos de que tienen a su alrededor personas que Dios ha puesto en su camino para que se encuentren con Jesús. Jesús llamaba «para que estuvieran con él y para enviarlos» (Marcos 3, 14). Poco a poco los grupos de vida han ido acogiendo algunas características propias de la células. Ahora ha llegado el momento de cambiar el nombre y asumir la metodología con todos sus elementos, incluso en el que más cuesta que es el de reunirse en casas. Haremos una presentación de la Células a toda la parroquia próximamente en las Misas del fin de semana porque todos estamos invitados a formar parte de una célula, a ser DISCÍPULOS MISIONEROS. Para ver las fotos del encuentro de ayer pincha aquí.