El pecado más grande del rico no era la gula o la avaricia sino la indiferencia. La descripción del principio es tremenda. Lázaro vivía en su portal donde los perros le lamían las llagas y nadie de esa casa le daba ni las sobras que se daban a las gallinas y a los perros. Nosotros vivimos a las puertas de África y no se si somos conscientes de la situación de nuestro vecino del sur. Vivimos a golpe de noticia y mientras no nos pongan en la pantalla sus llagas no nos enteramos de nada. Esta mañana me he enterado de que una persona de la parroquia ha estado un mes en la UCI con COVID muy grave y me ha dolido mucho no saber nada. He vivido estas semanas ajeno a su dolor. Una delas familias más débiles sin el consuelo de su pastor. En este caso no me he enterado. Pero pienso si en otros casos ando ocupado en mis cosas e me es indiferente el dolor de los que tengo cerca, en mi misma calle. Feliz dia bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.